TAXIBOY es un ensayo fotográfico sobre la cotidianeidad de trabajadores sexuales varones
que realizan su actividad en las calles del barrio de Once en el centro de la Ciudad de Buenos Aires.
TAXIBOY is a photographic essay about the daily lives of male sex workers who carry out their work on the streets of the Once neighborhood, located in the center of Buenos Aires.
TAXIBOY es el término con el que se identifican la mayoría de los trabajadores sexuales varones del Once, un apelativo de la
jerga callejera inconfundible en Argentina y que no es usual en otros países hispanohablantes. En gran parte del imaginario
social el trabajo sexual está asociado principalmente a mujeres cisgénero y mujeres trans que son quienes tienen mayor visibilidad
y quienes forman colectivos organizados y en lucha por sus derechos. La realidad del trabajo sexual masculino callejero a pesar
de ser visible, está invisibilizada, estigmatizada y frecuentemente criminalizada por los medios, además de ser ignorada por
la sociedad en general. La mayoría de los trabajadores sexuales varones realizan su actividad en la clandestinidad.
Todo esto contribuye a que estén en situación de gran vulnerabilidad, expuestos a situaciones de violencia, prácticas
sexuales de riesgo y consumo problemático de sustancias, con peligro real de una muerte temprana.
TAXIBOY is the term by which most male sex workers in Once identify themselves. It is a street slang expression that is unmistakable in Argentina and uncommon in other Spanish-speaking countries. In much of the public imagination, sex work is mainly associated with cisgender women and trans women, who are more visible and have formed organized groups advocating for their rights. The reality of street-based male sex work, although visible, is often hidden, stigmatized, and frequently criminalized by the media, as well as ignored by society at large. Most male sex workers operate clandestinely. All of this contributes to major vulnerability, exposing them to violence, risky sexual practices, and problematic substance use, with a real danger of early death.
TAXIBOY nace en el proceso de investigación del largometraje documental Miserere que sigue el recorrido
de un grupo de trabajadores sexuales del Once en una jornada de verano y fue proyectado en salas y festivales de
cine entre los años 2019 y 2023. Las primeras fotografías de TAXIBOY fueron producidas en el 2012 en el proceso de
investigación del largometraje durante el relevamiento de espacios y protagonistas. El grueso de las imágenes de la
obra fueron tomadas entre el 2022 y el 2024, atravesadas por la gran dificultad que implica el acceder y contactar
a los trabajadores sexuales para realizar las fotografías.
TAXIBOY se desarrolla en tres formatos, la obra en papel para ser montada en diferentes espacios, un fotolibro digital
y una web con una muestra virtual permanente. La web además de sostener la muestra virtual, contiene apartados con
entrevistas a trabajadores sexuales varones, textos y audiovisuales sobre trabajo sexual en general y sobre trabajo
sexual masculino en particular e información sobre organizaciones latinoamericanas vinculadas a la lucha por los
derechos de trabajadoras y trabajadores sexuales, proponiéndose así como un recursero sobre la temática, abierto a
ser usado y replicado, de manera de multiplicar los discursos sobre trabajo sexual masculino y generar un impacto transformador.
TAXIBOY emerged during research for the feature-length documentary Miserere, which follows a group of male sex workers
in barrio del Once during a summer day, and was screened in theaters and film festivals between 2019 and 2023. Initial photographs for
TAXIBOY were produced in 2012 as part of the research for the documentary, during the scouting of locations and protagonists.
The bulk of the images were taken between 2022 and 2024, with the challenge of accessing and contacting sex workers to be
photographed.
TAXIBOY is presented in three formats: printed works for exhibitions at a variety of venues, digital photo-book,
and a permanent virtual exhibition website. In addition to hosting the virtual exhibition, the website contains
sections with interviews to male sex workers, texts and audiovisual material on sex work in general, and specifically on male sex work,
as well as information about Latin American organizations advocating for the rights of sex workers, thus serving as a resource hub
on the subject, open for use and replication, to amplify discussions on male sex work generating a transformative impact.
TAXIBOY se propone como una intervención política desde la fotografía. Lo negado convertido en obra de arte, subvierte
su destino de ocultamiento. Realizando un rescate de aquello que está en los márgenes, la obra revaloriza el trabajo sexual callejero
masculino como un aspecto de la cultura popular que trasciende la realidad de la ciudad de Buenos Aires, inscribiéndose en un
marco más amplio como parte de un elemento presente y negado en las grandes urbes latinoamericanas. En TAXIBOY son retratados
los protagonistas en su contexto cotidiano. El barrio de Once, su diversidad cultural y arquitectónica, sus comercios y los
vestigios de historia de la ciudad que se observan en sus calles, son el marco de las fotografías.
TAXIBOY is intended as a political intervention through photography. The denied, transformed into art, subverts its destiny
of concealment. By retrieving that which is marginalized, the work revalues street-based male sex work as an aspect of popular culture that
transcends the reality of Buenos Aires, fitting within a broader framework as part of a hidden yet present element in large Latin American
cities. In TAXIBOY, the protagonists are portrayed in their everyday context. The Once neighborhood, with its cultural and architectural
diversity, its businesses, and the remnants of the city's history visible in its streets, serves as the backdrop for the photographs.
TAXIBOY habilita un cuestionamiento sobre lo que es legítimo mostrar en el arte y la cultura. Se trata de desestabilizar la sentencia de que aquello que es preferible no observar, no enunciar, está condenado al olvido.
TAXIBOY enables a questioning of what is legitimate to display in art and culture. It’s about destabilizing the notion that what is preferred unseen, unspoken, is condemned to oblivion.
Cineasta queer argentino. Nació en San Juan en 1981. Trabajó en producción de comerciales, documentales, videoclips y animación. Tiene experiencia en docencia audiovisual y un amplio recorrido en cine social y comunitario. Sus cortometrajes fueron proyectados en festivales de cine en diversos países. Director y guionista de “Durazno”, seleccionado en alrededor de treinta festivales de cine y de Miserere largometraje documental proyectado en más de una docena de festivales internacionales, finalista de Tribeca Latin America Fund 2017 y Competencia oficial de los 31es Rencontres de Toulouse, en Francia.
Queer Argentine filmmaker. Born in San Juan in 1981, he has worked in the production of commercials, documentaries, music videos, and animation. He has experience in audiovisual teaching and an extensive background in social and community cinema. His short films have been screened at film festivals in various countries. He wrote and directed Durazno, which was selected by around thirty film festivals, and Miserere, a feature-length documentary screened at more than a dozen international festivals, a finalist for the Tribeca Latin America Fund 2017, and part of the official competition at the 31es Rencontres de Toulouse in France.
Nació en Buenos Aires, en 1981. Estudió Cine documental en la Universidad Popular Madres de Plaza de Mayo. Se formó como fotógrafa en la Asociación Argentina de Fotógrafos Profesionales y en la Escuela Argentina de Fotografía. Se desempeñó como fotógrafa en diversas revistas y periódicos independientes. Realizó la fotografía fija de la película “Miserere”. Trabaja hace más de 10 años en el CONICET cómo fotógrafa científica, periodística e institucional.
Afro-Argentine photographer. Born in Buenos Aires in 1981, she studied Documentary Film at the Universidad Popular Madres de Plaza de Mayo. She formed herself as a photographer at the Asociación Argentina de Fotógrafos Profesionales and the Escuela Argentina de Fotografía. She has worked as a photographer for various independent magazines and newspapers. She was the still-photographer for the film Miserere. She has been working for over 10 years at CONICET as a scientific, journalistic, and institutional photographer.